Plan de acompañamiento académico en lectura escritura y argumentación

Este blog está dedicado a “transmitir” algunos aspectos lingüísticos para el desarrollo de diferentes actividades con el lenguaje en el contexto de la educación superior y en el marco de la alfabetización académica. El Blog hace uso de los saberes que transitan a través de la cultura académica. El desarrollo de este blog está pensado considerando la naturaleza de cada comunidad académica, las competencias con el lenguaje y las realizaciones posibles que pueden desarrollar las personas en una determinada situación comunicativa.

La idea de transmitir: En este blog se entiende por transmitir como la actividad elemental del acto mismo de enseñar, que no es otra cosa que mostrar a las nuevas generaciones sistemas de signos para que aprendan a moverse en el mundo. Cada comunidad determina dicho sistema de signos. La idea de “transmitir” no es homologable a una formación repetitiva, no creativa o memorística. Cada maestro cuenta con dispositivos pedagógicos que le permiten al estudiante ingresar, descubrir, apropiarse de los saberes. Cada espacio dispone un “conocimiento educativo”, es decir, de unos saberes que deben ser enseñados.

La idea de comunidad académica: En cada comunidad académica, los sujetos que participan de ella legitiman un conjunto de saberes que hay que dominar para pertenecer a ella. De ahí que los saberes estén agrupados en facultades que les permite diferenciarse de acuerdo a la naturaleza de su objeto de estudio,  denominarse como disciplina o campo y establecer sus niveles de diálogo con otras disciplinas. Las comunidades académicas también establecen los tipos de prácticas en su campo de saber, los autores con los que se dialoga, la vigencia de unos postulados u otros que operan de acuerdo a las circunstancias sociohistóricas. En pocas palabras, las comunidades académicas establecen las formas  en las que sus saberes operan en relación con el mundo.

El marco de la alfabetización académica: Los marcos nos permiten construir los saberes necesarios respecto a un saber específico. Los marcos preexisten a la realización. Son las nociones más amplias, engloban las realizaciones particulares. Por ejemplo, las diferentes concepciones de novela determinan hasta qué punto algo es una novela o no; la concepciones de ensayo nos dicen si algo se aparece o no a un ensayo, y qué tipo de ensayo es. Parte de lo que podemos comprender cuando nos comunicamos está determinado porque culturalmente conocemos el significado de las palabras. En educación superior aprendemos gracias al uso de ciertos marcos conceptuales, los que nos brindan cada espacio académico; pero también al empleo estratégico de la escritura y la lectura académicas. Esto es dentro de un práctica de textos que circulan en el aula para su apropiación, ya sea a partir de la lectura o de la escritura. Dominar estos modos formales de apropiación de los saberes en educación superior pueden garantizarnos que tengamos mejor desempeño en nuestra educación.

Lectores estratégicos de textos académicos:

Según el investigador Chileno Giovani Parodi, a la hora de acercarnos a un texto académico debemos tomarnos en serio los siguientes aspectos y pasos para ser más asertivos. En términos generales, cuando hacemos un acto de lectura, sea de un texto escrito o de uno mediado por la oralidad, necesitamos estar atentos a realizar cuatro acciones específicas: descifrar o decodificar palabras escritas, comprender el significado de esas palabras; evaluar el contenido del texto, aplicar lo leído a situaciones concretas. Para ello es necesario tener en cuenta las siguientes nociones desde donde podemos realizar estas acciones:

  • La lingüística: las palabras tienen un primer nivel de significación. Se aloja en el texto mismo y puede tener correspondencia con la noción general, que puede darnos un diccionario general, etimológico o específico del campo de saber.
  • Los marcos del lector: Las palabras pueden variar el significado de acuerdo a los marcos de comprensión que un lector novato o especializado tenga sobre el tema. De ahí que muchos lectores pasen literalmente por encima de las palabras porque estas no les dicen nada, pero para un lector experto, las palabras pueden estar significando un giro rotundo en la concepción que se tenía o no del tema. De ahí, que la mejor persona para orientar un proceso de lectura en un campo de saber sea el maestro.
  • Los elementos contextuales: El significado de las palabras puede variar de acuerdo al contexto de comunicación o social en que se emplean. Una misma palabra puede significar diferentes cosas de acuerdo a las situaciones comunicativas.

 

Relación cootextual Es la relación que una palabra tiene con las anteriores con las que le sigue. Esta relación va encadenando el sentido, la dirección o el significado que adquiere una palabra dentro de una cadena mayor llamada enunciado, oración o párrafo.  Dicho de otra manera, las palabras cooperan entre sí para construir un significado más amplio.
Relación Intertextual En un texto, ya sea que esté articulado por palabras, imágenes o música, cada significante puede estar dialogando con otros textos. Una película puede señalarnos, por ejemplo, que tomó algo de otra. En un ensayo, el autor dialoga con otros textos que va articulando la argumentación, ya sea como cita de autoridad (apoyar su punto de vista), o como cita polémica (para controvertirla).
Relación contextual El contexto puede definirse como las condiciones de producción del discurso. Estas condiciones de producción de discurso determinan de qué manera usamos las palabras, qué tipos de expresiones son adecuadas en una situación determinada, pero también son una virtualidad del lugar social de enunciación. Sabemos cómo hablar al profesor, qué decir en unas condolencias, qué tono emplear en una carta, cómo expresarnos en privado y cómo hacerlo en público. Es decir, buscamos constantemente la educación entre el contenido y la forma. El contexto está atravesado por relaciones de poder, por la ideología o la cultura.