Las funciones del lenguaje según Karl-Bühler

Bernal. L., (2008). Panorama de lingüistas del siglo XX. Bogotá: Instituto Caro y Cuervo, pp. 53-58.

Biografía

Nació Bühler en Austria en la ciudad de Meckesheim. Psicólogo y lingüista, estudio además medicina en Friburgo y en su ejercicio de profesión trabó amistad con Nicolai de Trubetzkoy, uno de los fundadores de la Escuela de Praga, quien lo llevó a las reuniones del Círculo. Allí conoció a otros miembros de la escuela y presentó algunos trabajos sobre fonética y fonología, los ejes centrales de las investigaciones de la escuela praguense. Su obra magna Teoría del lenguaje es parte también de la Escuela de Praga. Conviene añadir que, si bien Roman Jakobson y Nicolai de Trubetzcoy fueron figuras descollantes de la Escuela, otras personalidades como su fundador Mathesius y André Martinet, entre otros, se consideran como pertenecientes al del Círculo Lingüístico de Praga.

Fue profesor de Munich, Dresde y Viena. En la capital austriaca permaneció por varios años, entre 1922 y 1938. A raíz del advenimiento de la SEgunda Guerra MUndial, Bühler tuvo que emigrar a los Estados Unidos en 1939. Radicado en California, ejerció en un comienzo su profesión de médico y luego se dedicó a la sicología clínica. Abrió su consultorio en los Ángeles y tuvo un éxito grande, pues fue considerado como uno de los mejores expertos en esa rama de la sicología. Para desgracia de la ciencia del lenguaje, nunca más volvió a ocuparse de la lingüística. Murió en los Ángeles en 1963.

Comentarios a su obra

Teoría del lenguaje es una obra capital. Publicada en 1934, hoy en día sigue considerándose como uno de los libros imprescindibles en los estudios lingüísticos. Consta de un prólogo, una introducción y cuatro capítulos en los cuales desarrolla, metódica y originariamente, sus concepciones sobre el lenguaje. En la introducción señala Bühler la manera como discurrieron los estudios sobre el lenguaje, “ayer” y “hoy”. Los cuatros capítulos se titulan.

  • Los principios de la lingüística.
  • El campo mostrativo del lenguaje y los demostrativos.
  • El campo simbólico del lenguaje y los nombres.
  • Estructura del habla humana: elementos y composiciones.

Las ideas fundamentales de Bühler que platón había manifestado en el diálogo Cratilo que el lenguaje es un organon (instrumento) para comunicar uno a otro algo sobre las cosas” (pág.36). En este momento, entonces comienzan a definirse las tres funciones del lenguaje. En un trabajo previo que data de 1938, Bühler había dicho: “Triple es la función del lenguaje humano: manifestación, repercusión y representación”. Pero “hoy-dice el pensador austriaco- prefiero los términos expresión, apelación y representación” (pág. 41). He aquí, entonces, su muy conocido modelo:

 

Buhler

El símbolo del centro simboliza el fenómeno acústico concreto. Tres momentos variables en él están llamados a elevarlo por tres veces veces distintas a la categoría del signo. Los lados del triángulo inserto simbolizan esos tres momentos. El triángulo comprende en su aspecto menos que el círculo (principio de la relevancia abstractiva).Los grupos de línea simbolizan las funciones semánticas del signo lingüístico (complejo). Es símbolo en virtud de su ordenación a objetos y relaciones; síntoma (indicio), en virtud de su dependencia del emisor, cuya interioridad expresa, y señal en virtud de su apelación con el oyente, cuya conducta externa o interna dirige como otros signos de tráfico.

Roman  Jakobson tomó las tres funciones de lenguaje señaladas por el austriaco y le adicionó la función fática (o cháchara humana) que establece una relación social de cohesión dentro del grupo; la función poética en la que el énfasis del uso del lenguaje  se centra en el lenguaje mismo  y, por último, la función metalingüística en la que para hablar del lenguaje hay que recurrir al mismo lenguaje (metalenguaje).

  • El lenguaje tiene íntegramente el carácter de signo.

Ya lo había expresado Saussure en las cátedras de lingüística que desarrolló en París y Ginebra: la lengua es un sistema de signos en el seno de la vida social. Definió el signo como la unión indisoluble de un significante y un significado y lo dotó de cuatro características: arbitrariedad, linealidad, mutabilidad e inmutabilidad.  

  • El esquema de los cuatro campos.

El profesor Szemerényi, en su obra ya mencionada, toma la dualidad expresada por Humboldt: energeia, ergo, lengua, y la representa en el siguiente esquema.

I II
 1. Acción verbal

 2. Acto verbal

Producto lingüístico

Forma Lingüística

  1. Son los fenómenos que tienen que ver con el sujeto
  2. Son los fenómenos que ocurren fuera del sujeto.

Acota el profesor húngaro que la dicotomía I-II parece clara pero la 1-2 no lo es tanto. Coteja Bühler el producto lingüístico con otras creaciones del hombre como pueden ser una “fuga” de Bach o la estatua de la Libertad, pero sucede que el producto lingüístico  debe estar desligado del sujeto y ha de ser intersubjetivo, mientras que la fuga de Bach no lo es. Concluye Szemerényi, entonces, que se llega así a una lengua del individuo, punto es muy discutido por cuatro Saussure había planteado que la lengua es social y el habla individual .

  • El lenguaje se define como un sistema de dos clases.

Dos clases de convenciones son la base para la definición del lenguaje. Cada una de las representaciones se elabora en dos etapas: elección de palabras y construcción de la frase.  Es lo que se denomina como el “dogma del léxico y la sintaxis”. De esta forma se logra, afirma Bühler: “con un repertorio limitado de convenciones y, por consiguiente, de formas lingüísticas, se puede representar de modo suficientemente diferenciado y exacto una multiplicidad ilimitada”  

Añade Szemerényi (pág. 128) con mucha razón que ahí se encuentra la base para la futura lingüística generativa. en efecto, Chomsky retoma el apotegma de Humboldt de que “medios finitos generan mensajes infinitos” para armar el andamiaje de su teoría. Adviértase, además, que los emdios finitos son el lexicón y las reglas que cada lengua posee. Con ellos los hablantes generan un número ilimitado (infinito) de oraciones.

Finalmente, las anotaciones últimas de Bühler sobre los signos, que las llamó teoría de los campos muestran que ellos no están aislados, solos, “sino dentro de un contexto mayor, de un entorno que puede  ser deíctico o simbólico y, en consecuecnia, debemos diferenciar entre un campo mostrativo y un campo simbólico” (idem)

El pensador austríaco siempre entendió que el lenguaje debe mirarse como un sistema de signos en el cual las funciones que desempeñan deben considerarse como herramientas (órganon) por medio de las cuales, sienten y opinan sobre las cosas.

Obras principales

 

-Teoría de la expresión.

Teoría del lenguaje.

La sicología de la forma.

Manual de sicología.

Referencias citadas: (faltan)